Entrecruzamiento del colágeno corneal asistido con iontoforesis: CXL-I
Files view or download
Files view or download
Date issued
2016Publisher
Servicio Gallego de Salud, Agencia Gallega para la Gestión del Conocimiento en Salud (ACIS), Unidad de Asesoramiento Científico-Técnico (avalia-t)
Type of content
Libro
DeCS
queratocono | colágeno | evaluación de tecnologías biomédicas | iontoforesisMeSH
Keratoconus | Technology Assessment, Biomedical | Iontophoresis | CollagenAbstract
Introducción: el queratocono (QC) es una enfermedad degenerativa de la córnea de etiología desconocida.
Se caracteriza por un adelgazamiento progresivo de la córnea en la que adopta forma de cono irregular,
originando un importante deterioro visual. Actualmente, las opciones terapéuticas disponibles ofrecen una
corrección temporal del defecto refractivo, pero no abordan el problema subyacente de la integridad
biomecánica de la córnea, ni la posibilidad de retrasar y/o detener la progresión de la enfermedad. El
entrecruzamiento del colágeno corneal asistido con iontoforesis (CXL-I), es una técnica transepitelial, no
invasiva, que trata de incrementar la estabilidad biomecánica de la córnea, combinando una solución
oftálmica de riboflavina (vitamina B2) y radiación ultravioleta A. Para potenciar la difusión de la riboflavina a
través del epitelio intacto, se aplica un campo eléctrico local de baja intensidad. Este procedimiento se
plantea como opción terapéutica capaz de detener o retrasar la progresión de la enfermedad.
Objetivos: evaluar la efectividad y seguridad clínica del entrecruzamiento del colágeno corneal asistido con
iontoforoesis (CXL-I) como técnica terapéutica en el tratamiento de las ectasias corneales y otras patologías
de la córnea.
Métodos: se realizó una revisión de la literatura científica sin límite temporal y hasta mayo de 2016 en las
siguientes bases de datos: Medline, Embase, CRD, HTA, Inahta, ECRI, Biblioteca Cochrane Plus, ISI Web of
Science, así como una búsqueda específica de ensayos clínicos en marcha. Para completar esta fase se
realizó la revisión manual de la bibliografía citada en dichos artículos, y búsquedas adicionales en
metabuscadores como Google académico, sociedades científicas o agencias de evaluación nacionales e
internacionales para aportar toda la información de interés relevante. Dos investigadores realizaron la
selección de los estudios, de manera independiente y en base a unos criterios de inclusión y exclusión
previamente establecidos, resolviendo por consenso cualquier discrepancia. Se procedió a la extracción y
síntesis de la información en tablas de evidencia siguiendo una metodología sistemática. Los estudios se
clasificaron según su calidad metodológica en base a las recomendaciones de la guía para la elaboración y
adaptación de informes rápidos de evaluación de tecnologías sanitarias de la RedETS.
Resultados: se incluyó un ensayo clínico aleatorizado (ECA) y 4 series de casos de tipo prospectivo y
retrospectivo. Globalmente, se describen 234 procedimientos procedentes de 204 pacientes, y en todos los
casos, el CXL-I se utilizó para el tratamiento del QC progresivo. En base a los resultados del ECA, se indica
que el CXL-I es un método eficaz para estabilizar o detener la progresión del QC a 2 años, sin obtener
mejoras significativas en los parámetros visuales o topográficos. Permite alcanzar una concentración
adecuada de B2 en el estroma de la córnea, pero su efectividad es inferior a del CXL clásico. La tasa de
fracaso asociada al CXL-I fue del 1,3% y del 0% con el CXL. No se observaron diferencias significativas en la
agudeza visual corregida y la no corregida permaneció estable en ambos grupos y sin diferencias
significativas. La presencia y profundidad de las líneas de demarcación fue superior con el CXL. A pesar de
mantener intacto el epitelio de la córnea, el CXL-I no fue un tratamiento exento de complicaciones ni
indoloro. La mayoría de los efectos adversos fueron de carácter leve y transitorio y parece que produce
menos dolor en los 3 primeros días tras la intervención.
Discusión: los estudios presentaron ciertas limitaciones metodológicas que podrían afectar a los resultados
de eficacia y seguridad: realización de estudios en poblaciones heterogéneas, utilización de diferentes
escalas de clasificación del grado de enfermedad, heterogeneidad en la definición de progresión de la
enfermedad o variabilidad en la determinación de los parámetros topográficos, entre otros. La mayoría de
los datos procedieron de estudios de carácter observacional, siendo la principal limitación de este tipo de
estudios la ausencia de grupo de comparación. La evidencia disponible es limitada, describiéndose 234
procedimientos procedentes de 204 pacientes y proviene mayoritariamente de estudios preliminares con
escaso seguimiento (máximo 2 años). Se desconoce la eficacia y seguridad del CXL-I a largo plazo, o la
eficacia de la reintervención en caso de ser necesaria. Tampoco existen datos sobre su posible impacto en la
necesidad de trasplante. Estas incertidumbres no permiten establecer conclusiones sólidas al respecto,
siendo recomendable esperar a la publicación de los resultados de los ECAs actualmente en marcha.
Conclusiones: en base a los datos analizados en esta revisión, se estima que el CXL-I es capaz de estabilizar
y/o retrasar la progresión del QC, siendo su eficacia inferior a la del CXL clásico. Se considera un
procedimiento de bajo riesgo, y la mayoría de las complicaciones transitorias y de escasa gravedad. Es
necesario interpretar estos resultados con cautela, ya que la evidencia existente es muy limitada, en
cantidad y calidad y procede de unos 200 pacientes tratados en todo el mundo. Ante la ausencia de
estudios comparativos de calidad (CXL vs CXL-I), y la incertidumbre existente sobre su eficacia y seguridad a
largo plazo, no es posible determinar que mejore los resultados de la técnica clásica.
The following license files are associated with this item: